El Gobierno de la República Dominicana ha respondido enérgicamente a las afirmaciones de varios senadores estadounidenses, incluyendo a Edward J. Markey, Elizabeth Warren, Bernard Sanders y otros, quienes sugirieron que el país sirve como puente en el tráfico de armas ilegales hacia Haití. Estos senadores formularon estas aseveraciones en una comunicación al presidente Joe Biden, en la que buscaban información sobre la posición de Estados Unidos respecto a la crisis en Haití.
La embajadora dominicana en Washington, Sonia Guzmán, expresó en una carta a los senadores que la República Dominicana rechaza firmemente estas acusaciones. Guzmán destacó que el país caribeño está comprometido en la lucha contra el tráfico de armas y que, durante la administración del presidente Luis Abinader, se han fortalecido las instituciones y capacidades para combatir el tráfico ilícito.
La embajadora subrayó que la República Dominicana considera la lucha contra el tráfico de armas como un compromiso de Estado, ya que este fenómeno contribuye a la violencia, la inestabilidad y socava la paz y el desarrollo económico. La carta también menciona que el Gobierno dominicano ha implementado medidas estrictas, como la instalación de un moderno escáner de rayos X en el puerto de Haina, que ha facilitado la detección de armas y municiones ilegales.
La respuesta oficial dominicana destaca que es injusto sindicar al Gobierno dominicano como responsable del tráfico de armas hacia Haití y reitera su compromiso con el control de la adquisición de armas ilegales. Además, aboga por el despliegue en Haití de la fuerza pacificadora aprobada por la ONU y reafirma su apoyo a los esfuerzos humanitarios para encontrar una solución duradera a la crisis en Haití.
La carta también señala que es sorprendente que los senadores hagan estas acusaciones, considerando que Estados Unidos, específicamente el estado de Florida, es uno de los principales centros de exportación de armas ilegales y municiones hacia América Latina y el Caribe, según fuentes públicas.
