El gobierno de Cuba ha anunciado un aumento sustancial en los precios de la gasolina a partir del 1 de febrero, con incrementos que superan el 500%. Esta medida, parte de una serie de acciones para abordar el fuerte déficit fiscal que enfrenta el país, incluye un aumento del 528% en el precio del litro de gasolina regular, pasando de 25 pesos cubanos a 132. Asimismo, la gasolina especial experimentará un aumento del 520%, elevando su precio de 30 a 156 pesos cubanos.
El ministro de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro, anunció estas medidas en una transmisión televisiva, destacando que la finalidad es adquirir combustible y garantizar un suministro estable. Además, se indicó que los turistas extranjeros deberán pagar el combustible en divisas, lo que también podría afectar el turismo, una importante fuente de ingresos para la isla.
Este aumento en los precios de la gasolina ha generado preocupaciones entre la población cubana, que ya enfrenta dificultades económicas, y se espera que tenga un impacto en los costos de vida y la movilidad, especialmente para aquellos que dependen del transporte privado.
Esta medida se suma a otros ajustes económicos implementados por el gobierno cubano en respuesta a la crisis económica, agravada por la pandemia, sanciones internacionales y desafíos estructurales. La situación económica en Cuba ha llevado a la necesidad de medidas urgentes para enfrentar el déficit fiscal y garantizar el suministro de combustible, una problemática persistente en el país.
Es importante señalar que estas medidas podrían tener repercusiones en diversos sectores, y la población cubana podría enfrentar desafíos adicionales en términos de acceso a bienes y servicios básicos.
