En su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), el presidente de Chile, Gabriel Boric, expresó una postura contundente sobre el conflicto en Medio Oriente, afirmando que no está dispuesto a elegir entre “el terrorismo de Hamás y el genocidio de Israel”. Boric condenó tanto los ataques violentos del grupo islamista Hamás como las respuestas militares de Israel, que considera desproporcionadas y que afectan gravemente a la población civil palestina.
El mandatario chileno hizo un llamado a la comunidad internacional para buscar una solución justa y equilibrada al conflicto, enfatizando la necesidad de proteger los derechos humanos de todos los involucrados y encontrar una vía hacia la paz. Boric se mostró crítico de las acciones violentas de ambos lados y destacó que no puede justificarse el terrorismo ni tampoco las acciones que resulten en la pérdida masiva de vidas inocentes, en referencia a las operaciones militares de Israel en Gaza.
Su postura se enmarca en la línea histórica de Chile de apoyar una solución de dos Estados para el conflicto, respetando tanto los derechos del pueblo palestino como los de Israel a vivir en paz y seguridad. Boric ha sido un defensor de los derechos humanos y ha expresado previamente su solidaridad con las causas palestinas, aunque también ha condenado el uso de la violencia para avanzar en dichas causas.
El mensaje de Boric resalta la complejidad del conflicto y el desafío que representa para los líderes internacionales encontrar un equilibrio entre condenar el terrorismo y abogar por una solución pacífica que evite la destrucción y el sufrimiento de las poblaciones civiles.
