El 30 de julio, la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) emitió un aviso al bando golpista en Níger, instándoles a restablecer el “orden constitucional” del país y liberar al presidente Mohamed Bazoum. La CEDEAO advirtió que, en caso de incumplimiento, no descartarían “el uso de la fuerza” para restablecer la normalidad.
En respuesta al golpe de Estado, varios países europeos, incluida España, han anunciado el inicio de las evacuaciones de sus ciudadanos que se encuentran en Níger. El Ministerio de Exteriores de España informó que más de 70 españoles serán evacuados por vía aérea debido al cierre del espacio aéreo nigerino y la inestabilidad en el país.
El golpe de Estado se inició el 26 de julio con el cierre de los accesos al Palacio Presidencial mientras el presidente Bazoum se encontraba en su interior. La Presidencia de Níger anunció en Twitter que elementos de la Guardia Presidencial llevaban a cabo una acción “antirrepublicana”. La CEDEAO estableció una serie de medidas contra los golpistas, incluyendo el cierre de fronteras y la prohibición de viajar para los implicados en el intento de golpe de Estado.
