Guy Philippe, exlíder rebelde y actual político haitiano, ha negado las declaraciones de su abogado, Reynold Georges, quien afirmó que Philippe buscaba negociar con el gobierno de Ariel Henry para controlar los ministerios de Justicia, Defensa e Interior. Según Georges, Philippe buscaba una salida pacífica a la crisis haitiana antes de lanzar su llamamiento a la desobediencia civil. Sin embargo, la oficina de Philippe ha atribuido estas declaraciones a un intento de desviar la atención y ha reafirmado el objetivo real de su cliente: la revolución.
Además, Philippe ha sido citado por la fiscalía para responder a acusaciones de destrucción, incendio, agresión y asociación delictuosa presentadas por una asociación de pequeños plantadores del Nordeste. Su abogado, Georges, ha confirmado la citación pero ha indicado que Philippe no tiene la intención de responder a las preguntas del comisario del gobierno en el tribunal de Fort-Liberté.
Estas revelaciones han generado controversia en Haití y han puesto de manifiesto la complejidad de la situación política en el país caribeño. Philippe, quien anteriormente fue condenado en Estados Unidos por blanqueo de dinero del narcotráfico, ha estado involucrado en varias facetas de la política haitiana, y su papel en los eventos recientes sigue siendo objeto de debate y escrutinio.
