La República Dominicana, a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, reiteró que sigue aplicando su política de deportación de personas que se encuentran en el país de forma ilegal según las leyes vigentes, como respuesta a las declaraciones de Acnur sobre la necesidad de acoger a los haitianos como refugiados debido a la crisis de violencia en Haití.
El coordinador residente de la ONU en República Dominicana, Mauricio Ramírez Villegas, aclaró que las operaciones aéreas entre República Dominicana y Haití son exclusivamente para trasladar personal no esencial debido a problemas de seguridad en Puerto Príncipe, enfatizando que no se trata de un corredor humanitario y que las acciones cuentan con el compromiso y generosidad del gobierno dominicano según protocolos establecidos.
