Close

La verja fronteriza no resultará en una cesión territorial del país a Haití

La construcción de un camino de doble vía y la implementación de una verja fronteriza en una zona montañosa de Dajabón, cerca de la frontera con Haití, están en marcha. Aunque el propósito de esta verja es proteger el lado dominicano de incursiones ilegales desde tierras haitianas, es importante destacar que no implica ninguna cesión de territorio por parte de la República Dominicana. La línea divisoria seguirá siendo determinada por las pirámides o mojones establecidos desde 1929.

Contrario a lo que se ha debatido públicamente, la construcción de la verja fronteriza no implica una cesión de terreno a Haití. Más bien, se construirá dentro del territorio dominicano para permitir la movilidad de las autoridades en ambos lados y evitar enfrentamientos en la línea fronteriza.

El ministro de Defensa, el teniente general Carlos Luciano Díaz Morfa, aclaró que no se trata solo de una verja, sino que también se está construyendo una carretera para facilitar la vigilancia y el patrullaje en la zona. El objetivo es garantizar una mejor supervisión, no regalar terrenos.

El proyecto incluye la construcción de 164 kilómetros de carretera de doble vía a lo largo de los 391.6 kilómetros de la frontera terrestre. Además de la verja fronteriza, se instalarán 74 torres de vigilancia, iluminación en todo el recorrido y tecnología inteligente avanzada para facilitar la supervisión entre ambos países.

La construcción de la verja física se divide en dos etapas. La primera cubrirá 52.8 kilómetros, divididos en cinco tramos, mientras que la segunda abarcará 110 kilómetros, divididos en nueve tramos. Cada tramo contará con torres de vigilancia y puertas de acceso para asegurar un control efectivo.

El proyecto, a cargo del consorcio Cofah, está en marcha y se estima que estará concluido para el segundo trimestre de 2024. El presupuesto inicial destinado a la construcción de la verja es de 1,680 millones de pesos, pero se prevé destinar un 25% adicional para cubrir posibles variaciones en el diseño definitivo.

Este proyecto busca combatir amenazas como el tráfico de mercancías ilegales, la trata y tráfico de personas, el narcotráfico, armas ilegales, el robo de vehículos y la depredación medioambiental, entre otros delitos. Las autoridades destacan que la frontera está controlada, aunque ocasionalmente pueden surgir eventos debido a la confluencia de personas en las fronteras de todo el mundo.

La comunicación con Haití se mantiene, aunque se reconoce que no es totalmente efectiva. Se realizan reuniones bilaterales y se busca mejorar la relación con las autoridades haitianas y las instituciones que operan en la frontera.

A medida que la verja fronteriza avanza, la vida en los pueblos fronterizos sigue su curso normal. El proyecto es ambicioso y requiere tiempo, pero se espera que tenga un impacto significativo en la seguridad y vigilancia de la zona fronteriza entre República Dominicana y Haití.

scroll to top