El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Román Jaquez Liranzo, hizo hincapié en el papel de la JCE como administradora del proceso electoral durante una cumbre con representantes de partidos políticos para discutir el marco regulatorio de la precampaña y campaña electoral. Jaquez Liranzo enfatizó que la JCE no es el verdugo del proceso electoral, sino una entidad encargada de garantizar el cumplimiento de las reglas de juego.
El presidente de la JCE citó el artículo 212 de la Constitución, que establece las competencias de la Junta Central Electoral, para respaldar su posición. Afirmó que la JCE tiene claro su papel y se comprometió a cumplir la ley y la jurisprudencia.
Sin embargo, señaló que la JCE se ha enfrentado a desafíos debido a vacíos legales y declaratorias de inconstitucionalidad de textos de la Ley de Partidos Políticos y Electoral. En un esfuerzo por garantizar un proceso transparente, informó que el Pleno de la JCE ha instruido a varias direcciones del organismo para que mantengan reuniones cada 15 días con los delegados de los partidos políticos.
Jaquez Liranzo también aclaró que la JCE no tiene facultad para conocer sobre crímenes y delitos electorales, aunque sí para denunciarlos. En última instancia, enfatizó que la JCE no debería ser vista como una institución que interfiere en el proceso electoral, sino como una entidad que lo administra.
La cumbre entre la JCE y los partidos políticos se llevó a cabo en la sede de la Junta Central Electoral y contó con la participación del Pleno de la entidad, compuesto por Román Jaquez Liranzo, Dolores Fernández, Patricia Lorenzo, Chami Samir Isa y Rafael Vallejo Santelises.
