El proceso de revisión y modificación del Código de Trabajo en República Dominicana se encuentra en un estancamiento, según lo señalado por José Luis León, vicepresidente de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC). El consejo consultivo del trabajo no ha tenido reuniones en más de siete meses, y la comisión técnico-jurídica encargada del proceso ha debatido aspectos importantes sin que se conozcan los resultados. La CASC espera alcanzar un consenso favorable, ya que consideran que dejar la reforma en manos de los legisladores podría generar problemas.
La comisión técnico-jurídica está integrada por representantes de los trabajadores, el Ministerio de Trabajo y los empleadores. Aunque se logró un consenso en la parte procesal, aún hay temas pendientes, como la cesantía. La CASC planea someter la propuesta de reforma al Congreso Nacional en próximas sesiones, sin tener una fecha específica definida.
Gabriel del Río Doñé, presidente de la CASC, enfatiza que a pesar de las mejoras en el panorama laboral dominicano, aún existe una gran brecha entre los salarios y el costo de vida. El país no ha alcanzado una verdadera justicia social, y preocupan el desempleo y la informalidad laboral. Con el lema “Por un modelo de desarrollo sustentable, trabajo decente y protección social”, la CASC realizará su XXI Congreso Nacional Eleccionario el 22 de julio, en el cual participarán más de 2,500 delegados para discutir y tomar decisiones en beneficio de los trabajadores y sus derechos laborales. El presidente de la República, Luis Abinader, estará presente en la ceremonia de apertura.
