En lo que va del año 2024, la República Dominicana no ha otorgado visas de turismo a ciudadanos haitianos, lo que refleja un endurecimiento de las políticas migratorias frente a la crisis en Haití. Esta medida es parte de un conjunto de decisiones tomadas por el gobierno dominicano en respuesta al aumento de la inestabilidad política, social y económica en el país vecino, lo que ha generado un flujo migratorio considerable hacia territorio dominicano.
La suspensión de visas de turismo se suma a otras restricciones migratorias que buscan controlar la entrada irregular de haitianos, en un contexto donde la seguridad en la frontera se ha convertido en una prioridad para el gobierno dominicano. Además, las tensiones diplomáticas entre ambos países se han intensificado debido a la situación de seguridad en Haití y las preocupaciones de la República Dominicana sobre los efectos de la migración en su propio territorio.
Las autoridades dominicanas han enfatizado que estas medidas no son permanentes, pero están condicionadas por la evolución de la crisis en Haití y el establecimiento de condiciones seguras para regular los flujos migratorios. Mientras tanto, sectores humanitarios y defensores de derechos humanos han expresado su preocupación por el impacto de estas políticas en los haitianos que buscan refugio o mejores oportunidades en República Dominicana.
La decisión de no emitir visas de turismo a ciudadanos haitianos en el 2024 es una señal clara de la postura más estricta que ha adoptado el gobierno en temas de control migratorio, en un intento de proteger su soberanía y gestionar mejor los desafíos que enfrenta la frontera.
