La tormenta tropical Franklin se retiró de la República Dominicana ayer, dejando a su paso una persona fallecida, comunidades aisladas, problemas en el suministro de agua, cientos de ciudadanos en albergues y daños en infraestructuras. Según informó el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) en una conferencia de prensa encabezada por el presidente Luis Abinader, los efectos del fenómeno fueron significativos.
El fallecido fue identificado como Carlos Marino Martínez, de 32 años, quien perdió la vida al intentar cruzar una cañada en la comunidad de Bandaño, en San Cristóbal. Además, se reportó la desaparición de dos personas: una que se lanzó a la cañada de Guajimía en Santo Domingo Oeste y un adolescente que se encontraba bañándose en el crecido río Nigua, en San Cristóbal.
Los daños a la infraestructura también fueron considerables. Cerca de 120 acueductos quedaron fuera de servicio, afectando a más de 1.6 millones de usuarios de agua potable. Se registraron perjuicios en 547 viviendas y alrededor de 700,000 clientes se quedaron sin servicio eléctrico, de acuerdo con el Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED). Las carreteras también sufrieron, con 2,760 vías dañadas y un puente averiado.
El paso de Franklin también obligó al cierre de varios aeropuertos, incluyendo Las Américas, La Isabela y el de La Romana, como medida de prevención. Sin embargo, el Aeropuerto Internacional de Punta Cana mantuvo sus operaciones normales.
A pesar del retiro de la tormenta, 31 provincias y el Distrito Nacional continúan en alerta roja y amarilla. Las autoridades han confirmado que la población puede regresar a sus actividades a partir de este jueves. El Ministerio de Salud emitió una alerta epidemiológica para prevenir el aumento de enfermedades en las áreas afectadas por las lluvias provocadas por la tormenta, instando a la atención de la población y el fortalecimiento del sistema de vigilancia y control de enfermedades.
