Aunque el gobierno destaca la digitalización de más de 300 servicios públicos, que supuestamente han ahorrado a la población más de 60,000 millones de pesos, un informe oficial reconoce que todavía persisten largas filas y trabas burocráticas que consumen tiempo y recursos de los usuarios.
La Dirección General de Pasaportes, que está ejecutando un proyecto de 6,000 millones de pesos para digitalizar el documento, es la que más quejas recibe.
Juan Antonio Estrellas, por ejemplo, agendó digitalmente una cita para renovar los pasaportes de sus hijos, pero tuvo que esperar tres meses y luego hacer una larga fila el día de la cita. “Es demasiado tedioso, porque tú pierdes la mañana entera”, comentó.
Por otro lado, Génesis García, quien reservó por teléfono, no encontró disponibilidad en Santo Domingo y tuvo que ir a Bonao. A pesar de viajar una hora y media, no pudo completar el proceso en un solo día y tuvo que regresar al día siguiente para finalizar la renovación del pasaporte.
